En 5 años el mundo va a ser completamente diferente a como lo conocemos hoy en día. Así como hace 5 años vivíamos en un mundo donde no existía o nadie conocía a Uber, Spotify, Waze, Shazam, Instagram y Snapchat -las cuales se han vuelto parte de nuestro día a día- o Airbnb, que pasó de 47,000 clientes a más de 17 millones de huéspedes solo en verano, el nacimiento de los smartwaches y de la impresión 3D, los autos autónomos, Google Maps, entre muchos otros cambios que han modificado radicalmente nuestra forma de comunicarnos y comportarnos, así como otros cambios, como el precio de los commodities, los cuales han bajado más del 50% y las valuaciones y tamaños de las empresas de tecnología han incrementado más del 200%, o la valuación del Bitcoin que hoy vale 1,512% más que hace 5 años.
El mundo financiero en 5 años será totalmente diferente. Un reciente estudio que me dejó sorprendido, afirma que el 72% de los millennials, que actualmente están en el rango de 17 a 37 años –quienes representan el 40% de la población de casi todos los países del mundo incluyendo México- prefieren ir al dentista que a un banco. Este dato habla por sí solo: el mundo, el sector financiero y la forma en que transaccionamos van a cambiar y no porque las empresas estén cambiando, sino porque los consumidores ya cambiaron y cada día cambiarán más. Esto impactará no sólo las instituciones financieras -las cuales deben empezar a mejorar sus procesos para adaptarse a las nuevas generaciones- si no las industrias en general, de lo contrario van a volverse obsoletas.
Las empresas sufrirán el impacto de dichas generaciones y cambios, por lo que deben empezar a crear canales para compras alternos, recepción de pagos digitales, atención al cliente, inclusive crear nuevos productos o servicios que estén adaptados a este nuevo perfil de cliente. Olvídense de los puntos de venta –los cuales son los aspectos más básicos de las ventas- hoy en día hay muchas empresas, financieras y no financieras que ofrecen muchas herramientas para atender, para vender y para cobrarle a los clientes.
Toda esta nueva tecnología va enfocada a que los procesos de compra y de toma de decisiones sean cada vez más fáciles, sencillos, rápidos y baratos. Si quiero ganarme al cliente más vale que esté desarrollando todos estos nuevos canales para que la experiencia del cliente cuando consuma conmigo sea más fácil, rápida y barata, de lo contrario, mi prospecto o cliente van a preferir comprarle a la competencia o simplemente van a crear sus propios canales.
En el sector financiero tradicional o no tradicional, debe haber un cambio radical en la forma de atender al cliente financiero, lo cual somos todas las personas y las empresas. Por ejemplo, el otro día estaba leyendo una entrevista que le realizaron a la Directora del Fondo Monetario Internacional donde afirmaba que los bancos, como los conocemos hoy, tienden a desaparecer y que las criptomonedas –bitcoins que actualmente las vemos como herramientas extrañas- van a ser el futuro, porque en pocas palabras quitan la intermediación de los bancos centrales y los bancos comerciales, inclusive las fronteras y los tipos de cambio, tanto para lo bueno como para lo malo, y esto a pesar de cualquier regulación o protección, va suceder, porque al final el consumidor es el que acaba decidiendo el futuro de un mercado, y eso hace que la innovación sobrepase a los reguladores y a las bancas centrales, por eso tenemos que cambiar ya, porque el mundo está cambiando.
Aunque esto nos parezca muy complicado, es una obligación de todos los que quieran mantener su empresa al día, empezar a hacer este tipo de inversiones, desarrollar sus áreas de tecnología e innovación, conocer e involucrarse en las cosas que están saliendo hoy, aunque nos parezcan raras o extrañas. Todas las empresas tienen su lado financiero, necesitan vender y cobrar para subsistir, requieren dinero. Esto los conecta directamente a toda esta ola de innovación tecnológica en el sector financiero (FINTECH), por lo que todas las empresas deben desarrollar dichos canales de venta, y conectarse con todas las herramientas y formas de pago alternativas.
Una institución bancaria no es el único canal por el cual tus clientes te pueden pagar, ¿ya exploraste la opción de bitcoins? Las primeras empresas que apliquen esta opción, serán las que se ganarán a los clientes. Así mismo, las SOFOMES, las empresas de Crowdfunding, P2P o Fondeo Colectivo, hoy ofrecen alternativas de capital, crédito y financiamiento, más fáciles, más sencillas y muchas veces más baratas que los bancos.
¿Qué estás haciendo para que tu empresa se adapte a estos cambios?, ¿qué acciones estás llevando a cabo en tu área financiera? Como persona física, ¿qué estás haciendo para poner tu dinero a trabajar?, ¿lo sigues depositando en tu cuenta de ahorro, de cheques, fondo de inversión o ya estás explorando algo nuevo?, ¿conoces las opciones que existen en el mercado actual?, ¿qué acciones estás realizando para financiarte?, ¿acudes a la sucursal bancaria y haces filas o utilizas un medio digital?, ¿cómo administras tus activos por pagar?, ¿cómo les das el domingo a tus hijos, con monedas o por medio de un depósito en su cuenta de iTunes, Google o Amazon? ¿Qué estás haciendo para adaptarte al futuro?