La mayoría de las personas que sueñan con emprender no lo hacen porque creen que necesitan dinero para hacerlo. He visto planes de negocio bien desarrollados que nunca se realizan y personas con ideas innovadoras que simplemente no ejecutan porque no tienen el recurso o porque no saben cómo conseguirlo, dejando como principal razón de no emprender el “No tengo dinero”. Ahí está el primer error, cuando uno emprende o cuando quiere emprender, el dinero es lo menos importante.
A veces el acceso al dinero fácil suele ser la causa del fracaso de un nuevo emprendimiento, pues muchas veces la crisis o la escasez nos hace sacar la mejor parte de nosotros, la más creativa o pensar mejores ideas, por eso la falta de dinero puede ser parte importante del éxito.
Es claro que todos los emprendimientos, ya sean lucrativos o no, necesitan dinero para iniciar y sostenerse, especialmente durante los primeros meses o años de operación, o hasta que los ingresos superen a los gastos para tener éxito sostenible en el tiempo. Claramente, todos los negocios necesitan dinero, pero no tenerlo, no es razón suficiente para no emprender o iniciar tu emprendimiento.
Lo primero que debes buscar, antes de pensar en el dinero, es cómo resolver un problema o como resolverlo de una mejor manera y conectarlo con algo que te apasione, te guste o te divierta. Cuando encuentras un problema en algo que te encanta, ahí es donde realmente encuentras tu pasión. Eso te ayudará a sacar adelante cualquier reto, a resolver cualquier necesidad, a enfrentar momentos difíciles a lo largo de su desarrollo. Lo importante es convertir esa pasión en el motor de tu emprendimiento, esto se logra cuando realmente disfrutas lo que haces.
Al principio, puede parecer que lo más importante sea ganar dinero rápidamente o generar retornos inmediatos. Sin embargo, lo primero que debes hacer es validar tu idea. ¿Qué significa esto? Significa que debes comenzar poco a poco, paso a paso, para validar que todo lo que has planteado, todas las predicciones que has hecho y todas las hipótesis que has formulado, se demuestren o en su caso las actualices.
Cuando empiezas poco a poco, no necesitas grandes cantidades de dinero. De hecho, muchas veces, necesitas muy poco. Al igual que las grandes historias de emprendimiento, algunos empezaron en el garaje de su casa, o en la oficina de alguien que les prestó un espacio. No necesitas gastar grandes sumas de dinero en una gran campaña de mercadotecnia. Es importante que empieces y vayas validando tu idea a medida que avanzas, ajustándola si es necesario.
Ya que tienes una idea, detectaste un problema y te decidiste a emprender, lo siguiente es contarlo. Comunícalo por todos lados, platícalo con tus amigos, con tu familia, con la gente que vas conociendo, con todo mundo, y no es porque estés buscando que te aplaudan, de hecho la mayoría de la gente te va disuadir para que no lo hagas o que mejor consigas algo seguro, pero tú lo vas a contar por todos lados, porque lo que buscas es encontrar otras personas que se apasionen por lo mismo que tu o le encante lo mismo, o les emocione tu solución, ahí tendrías un aliado ya sea para trabajar contigo, volverse tu socio o tu cliente, es la forma de empezar a tender puentes, fundamentales para el éxito de cualquier emprendimiento.
La forma de encontrar a las personas no es a través de la publicidad, ni invirtiendo grandes cantidades de dinero en campañas, es hablarlo; hablarlo hasta el cansancio y de esa forma la gente no solo se enterará de lo que estás haciendo o en lo que estás emprendiendo, sino que también irás conectando con gente que piense igual que tú.
Y no tengas miedo de que alguien te robe tu idea, eso no va a pasar, el 99% de la gente está apanicada en ejecutar, prefieren sus zonas de confort. Y a pesar de que una empresa ya funcionando, le guste tu idea y quiera ejecutarla por su cuenta, se va a tardar en hacerlo. Si ya decidiste ejecutar, no temas compartir.
Al fin y al cabo, siempre hay formas de levantar recursos, cualquiera podría ahorrar o vender su auto para empezar, o conseguir alguien que te ponga el dinero, lo importante es solucionar un problema y transmitir tu pasión cuando sales a pedir dinero, no digo que sea fácil, pero cuando tienes claro el problema que resolverás y transmitas y contagies tu pasión las posibilidades de hacerlo se multiplican.
Normalmente el dinero que va a invertirse en negocios busca más que solo grandes proyecciones financieras y rentabilidad, busca la pasión del emprendedor, es fundamental para conectar con el dinero cuando estás en las etapas iniciales.
Por tu cuenta, puedes meterte a una incubadora o buscar fondos, pero la realidad es que los primeros pesos que entran a un proyecto en sus inicios suelen ser de familiares y amigos, ellos suelen ser los primeros inversionistas. Esto no limita que tu puedas buscar fondos, pero por lo general, para ello debes llegar con una idea demasiado disruptiva y que pueda generar grandes retornos, o ideas que ya puedan demostrar una tracción, por lo que te recomiendo iniciar así, con familiares y amigos, personas que apuesten a tu idea como socios fundadores capitalistas o inversionistas
Otro consejo muy importante es que no te desanimes, a pesar de que las personas no encuentren atractiva tu idea, porque la realidad es que siempre se encuentran muchos “no” antes de recibir un “si”. La es clave tocar muchas puertas, ya sea para encontrar fondos o friends & family en busca de alianzas. No todo es dinero, a veces lo que necesitas es conectarte con otro empresario, con otra empresa que esté enfocada al mismo sector, puedes apalancarte de la infraestructura, ideas, fuerza de ventas de otras empresas.
Con estas alianzas no necesitas dinero en efectivo, lo que es muy beneficioso para ti en las primeras etapas, busca todas las alianzas que puedas, invierte el tiempo que necesites en ello, para eso sí vale mucho la pena entrar a incubadoras o a concursos de emprendimiento, aplica en todas las que puedas, competir en estos concursos también te da visibilidad, funciona igual que comunicar con todos hacia fuera. Conectar con gente interesada te abrirá canales.
Por último, ya que empieces con esos primeros levantamientos de capital debes generar tracción, que es simplemente la forma en que vas a demostrar que tu idea tiene potencial y que puede crecer mucho más. Cuando empiezas a generar esa tracción y tus clientes empiecen a multiplicarse, entonces será el momento ideal de buscar un poco más de dinero de manera institucional, fondos como venture capital, dinero mucho más institucional que está buscando oportunidades en el mundo. En México y en Latinoamérica, también hay mucho dinero buscando buenas oportunidades, la clave es cómo llegar a él y la clave es tocar muchas, muchas puertas, al tocar las suficientes, siempre lo encontrarás, el dinero está hambriento de buenas ideas.
Toma nota de estos pasos que te acabo de dar, haciendo mucho ruido, repitiéndolo muchas veces y tocando muchas puertas. Habrá momentos en que tal vez pongas en duda tu idea, pero no te desanimes, a pesar de que no sea fácil, a pesar de que expertos inversionistas te digan que tu idea no tiene futuro, si tú crees en ella, brinda una solución y te apasiona, se persistente. Es mucho más fácil salir adelante de momentos difíciles cuando haces algo que te encanta hacer.
Recuerda que mis redes sociales están abiertas si tienes alguna duda del tema o quieres que hable de otro en particular. Espero que sigas estos consejos y que ahora sepas por qué no necesitas dinero para emprender.
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